¿Qué son las aftas?
Las pequeñas úlceras bucales, a menudo denominadas aftas o úlceras bucales, suelen presentarse como lesiones pequeñas y dolorosas que pueden aparecer en los tejidos blandos de la boca, incluidos los labios, las mejillas, el paladar, la lengua y la base de las encías. Suelen ser redondas u ovaladas, con un centro blanquecino o amarillento y un borde rojo. Aunque resultan molestas, estas llagas suelen ser benignas y se resuelven por sí solas en una o dos semanas.
¿Cuáles son las causas de las llagas?
Las causas de las pequeñas úlceras bucales varían, pero pueden incluir lesiones en los tejidos blandos de la boca causadas por morder, cepillarse demasiado enérgicamente o comer alimentos punzantes. Otros factores, como el estrés, las carencias nutricionales (sobre todo de hierro, vitamina B12 y zinc), las reacciones alérgicas, los cambios hormonales o determinadas afecciones médicas, también pueden contribuir a su aparición.
¿Cómo se tratan las aftas?
El objetivo principal del tratamiento de las aftas es reducir el dolor y acelerar la curación. Los remedios locales, como los geles antisépticos o los colutorios medicinales, pueden ayudar a aliviar el dolor y prevenir la infección. Evitar los alimentos ácidos, salados o picantes también puede reducir la irritación. Aplicar hielo o tomar antiinflamatorios no esteroideos (AINE) puede ayudar a reducir la inflamación y el dolor.
¿Qué medidas preventivas pueden tomarse contra las aftas?
Para prevenir la aparición de pequeñas llagas en la boca, es aconsejable mantener una buena higiene bucal, utilizar un cepillo de dientes de cerdas suaves y tener cuidado de no morderse las mejillas o la lengua. También es beneficioso reducir el estrés y mantener una dieta equilibrada rica en vitaminas y minerales esenciales. Para las personas propensas a alergias o reacciones alimentarias, evitar los desencadenantes identificados también puede ayudar.
¿Cuándo se debe consultar a un profesional sanitario por una pequeña llaga en la boca?
Es aconsejable consultar a un profesional sanitario si las llagas en la boca persisten durante más de tres semanas, si reaparecen con frecuencia o si van acompañadas de signos de complicaciones como fiebre alta, dificultad para tragar o pérdida de peso. Estos síntomas pueden indicar una afección médica subyacente que requiere una evaluación y un tratamiento adecuados.
¿Cómo diferenciar una pequeña úlcera bucal de un herpes febril?
Las pequeñas úlceras bucales, o aftas, no son contagiosas y suelen localizarse en el interior de la boca. Tienen un centro blanquecino rodeado de una zona roja inflamada. En cambio, el herpes labial, causado por el virus del herpes simple, suele aparecer alrededor de los labios, está lleno de líquido y es muy contagioso. Las ampollas febriles pasan por varias fases, como picor y ardor, antes de reventar y formar una costra.
¿Es posible que las pequeñas úlceras bucales sean un signo de cáncer?
Aunque las pequeñas úlceras bucales suelen ser benignas, es fundamental consultar a un médico si no se curan al cabo de tres semanas, si se multiplican o si van acompañadas de un dolor inusual, sangrado sin motivo o sensación de dureza bajo las llagas. Estos síntomas podrían ser signos de cáncer oral. La evaluación médica precoz es esencial para un diagnóstico y tratamiento adecuados.
¿Se pueden utilizar remedios naturales para tratar las pequeñas llagas bucales?
Sí, algunos remedios naturales pueden ayudar a aliviar los síntomas de las pequeñas llagas bucales. La miel es famosa por sus propiedades antibacterianas y puede aplicarse directamente sobre las úlceras para reducir la inflamación y el dolor. La manzanilla, utilizada en infusión o aplicada como compresa, también puede ayudar gracias a sus propiedades calmantes y antiinflamatorias. No obstante, es aconsejable consultar a un profesional sanitario antes de iniciar cualquier tratamiento natural.
¿Con qué frecuencia aparecen las aftas en los adultos?
Las aftas son bastante frecuentes; alrededor del 20% de la población general las padece en algún momento de su vida. Pueden aparecer a cualquier edad, pero son especialmente frecuentes en adultos jóvenes y adolescentes. Pueden aparecer esporádicamente o reaparecer con frecuencia, dependiendo de factores individuales como los niveles de estrés, los hábitos alimentarios y el estado general de salud.
¿Existe alguna relación entre las aftas bucales y otras enfermedades?
Sí, en ocasiones las aftas bucales pueden estar asociadas a enfermedades subyacentes. Por ejemplo, enfermedades inflamatorias intestinales como la enfermedad de Crohn o la colitis ulcerosa, así como enfermedades autoinmunes como el lupus eritematoso sistémico, pueden ir acompañadas de la aparición de úlceras bucales. Además, las carencias vitamínicas, en particular de hierro, vitamina B12 o ácido fólico, también pueden favorecer la formación de úlceras bucales. Una evaluación médica puede ayudar a identificar y tratar la causa subyacente.